Si el café lo tomas por la mañana para despertarte, al mediodía para que no te entre la morriña y aún te tomarías alguno que otro más, esta es tu tarta.
Mi madre tiene una pequeña obsesión y es comprar revistas, ¡le encantan! Y si son de cocina y en otras lenguas, mucho mejor. La Ciambella surge de una de esas tantas revistas que mis hermanas y yo vamos ojeando todo el día. La foto era de impresión y obviamente ¡¡teníamos que hacerla!!
El resultado es magnífico tanto de aspecto como de sabor. La ciambella de café es perfecta además de preciosa para ese desayuno o eventazo que quieres celebrar.
Es un suave y esponjoso bizcocho al que incorporas mucho líquido y queda una textura impresionante. Hago ciambellas de diferentes versiones pero sin lugar a dudas: la mejor es la de café.
Le pongo virutas de chocolate y café y lo recubro con una decorativa glasa de esta preciada bebida, sin la cual muchos, entre ellas yo, no podría vivir.
Combínala con té o café y volará más rápido que un caramelo en la puerta de un colegio.